Descripción
Hoy en día, se considera que el running o carrera es una de las actividades más populares en todo el mundo al aire libre. Uno de los principales motivos que aducen los practicantes es mantener o mejorar su estado de forma, su rendimiento en alguna carrera popular (presencial u online) su salud y también por motivos estéticos o lúdicos.
Sin embargo, esta modalidad deportiva presenta una gran incidencia de lesiones, que oscila entre el 18.2% y el 92.4%. Lieberman et al. (2010) señaló que el calzado ha sido destacado recientemente como un posible factor relacionado con la incidencia de lesiones. Así, en los últimos años, han surgido nuevas tendencias en el diseño de las zapatillas deportivas, con mayor o menor acolchado, mayor o menor control de movimiento, etc., pero sin que ninguna de estas propuestas haya aportado evidencia de que la tasa de lesiones haya disminuido.
En consecuencia, una de las propuestas de mejora a este gran problema ha sido la inclusión de la práctica de carrera descalzo o barefoot running. Los autores que apoyan esta propuesta la justifican en las bases de la existencia humana y la tradición histórica de desplazarse descalzo a lo largo de nuestra evolución.
Independientemente de la experiencia de correr descalzo, se encuentran diferencias espacio-temporales entre correr con calzado y descalzo dentro de una misma sesión de carrera. Sin embargo, todavía existen muchas dudas sobre la influencia de la velocidad de carrera en la evolución de los parámetros espacio-temporales, tanto en carrera descalzo como con calzado confortable, tanto en corredores recreacionales como avanzados. En este contexto, el objetivo de la investigación que se plantea en este proyecto reside en comparar el rendimiento en las diferentes variables cinemáticas entre barefoot y shod running a dos velocidades de carrera distintas (velocidad confort y velocidad competitiva).